El banquete de bodas es uno de los momentos más importantes de esa ceremonia tan especial, pues es el momento en que las familias de los novios, así como sus amigos, se reúnen para compartir la comida o la cena en un ambiente de cordialidad y alegría por la pareja recién casada. Es también una oportunidad para que los novios expresen sus gustos y su originalidad, pues se trata de su noche más especial, pero sin olvidar que también los invitados deben disfrutar no sólo con los alimentos que se sirvan sino con el modo en que se lleva a cabo el banquete.

Hoy en día no existen reglas exclusivas sobre cómo se debe organizar una ceremonia de casamiento, al igual que no hay reglas que determinen lo que se puede hacer o no durante el banquete. Muchas bodas se hacen pensando en un tipo de decoración especial y el banquete debe reflejarlo. Muchos asesores de boda recomiendan concentrarse en esta parte de la fiesta para decidir sobre el concepto que desean para su boda.

Los servicios de banquetes para boda suelen incluir las mesas y un tipo particular de decorado, así como algunas opciones de menú. Sin embargo, la mayoría de ellas son fijas y no pueden ser modificadas. La opción en estos casos es contratarlo todo por separado.

Una boda cuyo tema sea los colores alegres y vívidos, debería contar con un menú que haga juego con esa idea, como cremas de colores vistosos, platillos decorados y postres con glaseados también de colores, que combinen con las servilletas, los manteles o los decorados.

Un menú tipo japonés es una gran idea pues la comida es ligera y se pueden preparar varios platillos diferentes sin que los invitados se queden sin probar alguno de ellos. Por el contrario, un menú italiano o mexicano requiere que se elijan muy bien los platillos, ya que esos tipos de comida son mucho más llenadores.

Sin lugar a dudas, los postres son el momento en que más se puede echar a volar la imaginación, ya que hay un gran número de opciones que, además, se pueden combinar casi de cualquier manera. De unos años a la fecha, las fuentes de chocolate se han vuelto muy populares, al grado de que casi todas las empresas de banquetes las ofrecen no sólo para bodas sino para todo tipo de eventos.