Cuando estamos por casarnos tenemos mucha presión sobre nosotros para que todo salga como lo planeamos, que los invitados estén puntuales, que la comida sea deliciosa, que el salón de fiestas sea de ensueño y claro, que el vestido sea la cereza del pastel. Sin embargo nada de esto vale si en realidad no estamos pasando un buen tiempo con nuestra pareja por algún pleito previo a la boda que acarree problemas que incluso pueden llevarnos a la cancelación del evento.

A veces cuando estamos tan inmersos en los asuntos de la boda, nos olvidamos de platicar en pareja qué queremos que suceda ese día pues es una celebración tanto para el novio como para la novia, no obstante hay maneras de hacerlo e incluso tiempos para que no se detone la bomba de estrés que nos ha estado acompañando en la planeación.

Hay seis temas que hacen pelear a las parejas muy frecuentemente antes de la boda, ya sea que tengan que ver con gustos encontrados o la participación de algún pariente:

• No llegar a un acuerdo satisfactorio

Este es el primer punto que causa conflicto, pues solamente si una de las dos partes fuera totalmente complaciente, se evitaría pasar por la discusión de cuál va a ser el tipo de boda que vamos a celebrar. Lo importante es escuchar y dialogar y no tratar de imponer.

• Dinero de los papás

Este es un paso peligroso, pues podemos terminar con papás o suegros que piensan que porque han puesto una cantidad para la boda, pueden elegir ellos mismos qué va a pasar en nuestra boda u opinar en el vestido de novia que usaremos.

• Con o sin niños

Y no hablamos de hijos, hablamos de si queremos o no que hayan niños en nuestra fiesta. Tanto si ya tenemos hijos o no, debemos pensar si lo que queremos es que la boda se convierta en un área de juegos.

• Testigos

Muy importante; tanto el novio como la novia tienen a ciertas personas especiales en la mira para que se conviertan en los testigos de la unión. Lo más conveniente es que cada uno escoja a un testigo.

• Mala relación de los padres

Este puede ser un punto muy delicado pero no debemos complicarnos por eso, podemos sentarlos en mesas distintas sin que haya la necesidad de un pleito. Si has tenido una mala experiencia con tus suegros o quieres leer las experiencias de otras parejas de recién casados con la familia política, conoce nuestra sección Diario de una novia donde puedes compartir tu experiencia.

• Autoinvitados

Estos son los típicos amigos o familiares que sin recibir invitación asumen que están invitados al magno evento. En este caso, las invitaciones con boleto son la mejor manera de cortar a los indeseados.